Esta es la experiencia de voluntariado en el servicio cotidiano de Stella Maris
El 28 de mayo de 2021 pasará a ser una de las fechas destacadas en el recuerdo de Stella Maris en Castellón: el buque de carga Nazmiye Ana, con tripulación turca, egipcia e india, atracado en el muelle exterior del puerto, sufrió un grave accidente que le hizo volcar quedando con la quilla al sol.
El accidente del NAZMIYE ANA
Sucedió al finalizar la operativa de carga. En apenas unos segundos, en medio de la confusión y el asombro, se produjo este triste suceso. En él, resultaron desaparecidos un tripulante y un estibador. El cuerpo del marino se halló horas después pero el del trabajador del puerto de Castellón todavía no ha sido rescatado del agua a fecha de hoy, agravando más el dolor de la familia, de los compañeros de trabajo y de toda la comunidad portuaria. También resultó gravemente herido un estibador, conocido y colaborador de Stella Maris en Castellón que se va recuperando rápidamente.
La tripulación del NAZMIYE ANA
Desde que ocurre el accidente, Stella Maris Castellón ha estado con los tripulantes. De hecho, uno de ellos se encontraba en los locales del Apostolado del mar haciendo unos trámites. Al ser advertido y llevarle al barco con la furgoneta de servicio de Stella Maris, enseguida vio la magnitud de la catástrofe. “Ha desaparecido mi tripulación”, decía en turco.
En los primeros momentos tras el accidente del Nazmiye Ana, suministraron ropa seca y compañía. Luego, trasladaron a la tripulación al hotel donde el agente consignatario les facilitó albergue. Y así, comenzó una larga serie de trámites y situaciones.
Desde el primer momento la tripulación solicitó que les pusieran en contacto con el inspector local de la International Transport Workers Federation – ITF. Y así, se comprobó las condiciones laborales tan precarias en las que se encontraba la tripulación india y las presiones que, de todas partes les llegaban. Muchas horas de reuniones y declaraciones.
Desde Stella Maris Castellón, su director, D. Albert Arrufat explica «nos habían advertido en muchas ocasiones, compañeros de otros Stella Maris, que, por desgracia, el valor y la importancia de nuestra labor se pone de manifiesto en los momentos duros. Y así ha sido.» Añade que ante una tragedia así que «nos ha venido al encuentro» confirma que desde Stella Maris «hemos intentado responder a partir de lo que conocíamos, pero sobre todo con el corazón y la humanidad que se merecen los marinos en una situación como ésta».
Stella Maris es el Hogar del marino lejos de su hogar. El hogar no son solo cuatro paredes sino las personas con las que creamos el lazo y el vínculo de la acogida, con los que hacemos camino juntos.